TNO presenta opciones de sostenibilidad para geotermia en los Países Bajos
TNO, con sede en los Países Bajos, presenta un caso para reducir las emisiones de CO2 de la calefacción geotérmica para convertirla en una alternativa más sostenible al gas natural
Aunque la calefacción geotérmica tiene emisiones de CO2 que son un 90% más bajas en comparación con las calderas de calor de gas natural, todavía no está completamente libre de emisiones. La organización de investigación con sede en los Países Bajos TNO ha propuesto algunas opciones para reducir a cero las emisiones de la calefacción geotérmica.
Los gases en los fluidos geotérmicos son el resultado de las reacciones químicas entre los fluidos y la formación del subsuelo. El porcentaje exacto de estos gases puede variar según el tipo de formación de la fuente geotérmica. Dorien Dinkelman de TNO cita el ejemplo de los fluidos geotérmicos del área de Westland que tienen concentraciones de gas relativamente más altas debido a la arenisca de Delft. Esto significa que el enfoque para manejar las emisiones puede tener que variar de un lugar a otro.
Tres opciones para reducir las emisiones
Un método que propone TNO es mantener el gas de formación en solución. En este caso, los gases simplemente se bombean de regreso al acuífero. Sin embargo, esta solución exige que la presión en el sistema geotérmico se mantenga en valores altos. Esto hará que la instalación sea más cara.
El segundo método consiste en quemar el gas de formación y capturar el CO2. Luego, el CO2 se reinyectará en la formación junto con los fluidos geotérmicos. Aunque la tecnología para hacer esto ya existe, también es la opción más cara. Este método puede resultar más económico si se puede ampliar. Por ejemplo, varios sitios geotérmicos pueden tener un sistema de captura de gas conectado.
El último método consiste en actualizar los gases de formación a calidad de gas natural y venderlos a las redes de calefacción existentes. Si bien esto no reduce las emisiones de CO2, hace que los Países Bajos sean menos dependientes de la importación de gas natural.
Reducir las emisiones en la fase de uso produce los mayores beneficios
Como parte de este estudio, TNO también analizó las emisiones totales de CO2 asociadas con la construcción de una instalación geotérmica. Según un análisis del ciclo de vida (ACV) de un proyecto geotérmico desde la construcción hasta el desmantelamiento, el 97% del impacto ambiental proviene de la fase de uso. Esto significa que realizar cambios en la fase de uso de la energía geotérmica brinda las mayores oportunidades para hacer que la industria sea más sostenible.
Sostenibilidad antes de costes
Hester Djikstra de TNO, comentó “Una alternativa sostenible casi nunca comienza con un buen caso de negocio”. Es casi seguro que las propuestas hechas por TNO requerirán gastos adicionales. Sin embargo, el problema principal deberían ser las emisiones, no el dinero. Hester añadió, “Es mejor ver cuál es la mejor solución para el problema y luego razonar qué se necesitará a partir de ahí”.
Los municipios y las regiones tienen el poder de impulsar alternativas de calefacción más sostenibles. A través de subsidios o impuestos adicionales a los combustibles fósiles, se pueden impulsar alternativas como la energía geotérmica y ayudar al país a avanzar hacia la transición energética.
Fuente: EBN