Lentitud de permisos y rechazo de comunidades, El Salvador
La lentitud en la tramitación de permisos a la hora de desarrollar un proyecto geotérmico junto a la oposición que están presentado muchas comunidades, son dos de los grandes retos que debe afrontar en conjunto el sector geotérmico.
Este tipo de problemas son cuestiones comunes que se están afrontando en prácticamente en todos los mercados. Respecto al retraso en la entrega de permisos y teniendo en cuenta que muchos de estos procesos se podrían realizar vía internet, de acara a acelerar su visto bueno, y es un lujo que no puede permitirse el sector teniendo en cuenta de que de por si un proyecto geotérmico conlleva más tiempo hasta su puesta en marcha si lo comparamos con otro tipo de tecnologías como la eólica o solar.
Al margen, las empresas desarrolladoras van a tener que empezar a tomarse muy en serio el tema del dialogo con las comunidades donde se desarrolla un proyecto ya que debido a un conjunto de factores como la falta de información o desconocimiento, pueden ser suficientes motivos como para paralizar la construcción de un planta.
Adjuntamos la nota de prensa del diario La Prensa Gráfica.
El Salvador es miembro de un pequeño grupo de países que dentro de sus matrices energéticas incluyen la energía geotérmica, y a pesar del potencial que posee el país, expertos aseguran que los permisos ambientales son un obstáculo a la hora de desarrollar los proyectos de generación geotérmica.
José Burgos, experto en geotermia y expositor en el primer Congreso Regional de Energía, desarrollado por la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), dijo que los proyectos de energía geotérmica deben pasar por múltiples autorizaciones por parte del Gobierno, y los permisos medioambientales son los que más demoran estas iniciativas.
“Eso es un ‘vía crucis’. Pedir un permiso ambiental para un proyecto geotérmico ha sido bien difícil y hay veces en las que han llegado hasta tres años para obtener un permiso, para poder ejecutar proyectos geotérmicos”, indicó Burgos en el evento.
El experto dijo que los proyectos también enfrentan otros desafíos, por ejemplo, el rechazo de las comunidades aledañas al área de exploración y el alto precio de las tierras.
Burgos también dijo que los proyectos de generación vía geotermia necesitan un largo tiempo de exploración e investigación para determinar que el calor del subsuelo cumple con los requisitos necesarios para convertirse y proveer electricidad.
Potencial
El Salvador incluye en su matriz energética la generación de energía geotérmica y esta se genera a partir del calor del subsuelo. La geotermia aporta el 25 % del consumo nacional de electricidad.
El experto dijo que el potencial es mayor y que se puede generar todavía más.
Burgos indicó que en las faldas del volcán Chichontepec, departamento de San Vicente, el Gobierno trabaja en busca de nuevos pozos geotérmicos.
El experto afirmó que los nuevos pozos podrían generar a lo sumo unos 30 megavatios, aunque autoridades de la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) habían previsto la generación de 40 megavatios.
LaGeo es la única empresa en El Salvador dedicada a la generación de energía eléctrica a partir del calor del subsuelo.
Son socios de esta compañía la CEL, a través de su subsidiaria Inversiones Energéticas S. A., y la empresa italiana Enel.
La CEL ha calculado que una planta generadora que aproveche el potencial que existe en San Vicente de 40 megavatios produciría energía suficiente para cubrir 243,000 hogares. Montar una planta generadora requerirá una inversión de unos $150 millones.
“También ya se está llegando a la identificación del recurso en el área de Chinameca (San Miguel). En Chinameca se han perforado varios pozos para determinar que existe un recurso que puede contribuir a la generación en El Salvador y se habla de un reservorio de 221 grados centígrados que es un reservorio de alta entalpía, y una potencia estimada inicial de 50 megavatios”, apuntó Burgos.
El experto dijo que es necesario aprovechar los recursos de baja entalpía (de poca temperatura, unos 150 grados centígrados), que si bien la generación es con pequeños proyectos, abonan a la matriz energética.
Fuente: La prensa Gráfica