Entrevista a la empresa colombiana ISAGEN

El paramo, tufiño (source: flickr/ marco Rodrigez ascuntar, creative commons)

Abraham Ormad 11 Sep 2014

Se avecinan tiempos de cambio en Colombia. Hace unos meses se anunció el establecimiento de la Ley 1715 donde se definen los instrumentos necesarios para la promoción y aprovechamiento de fuentes no convencionales de energía, el marco de la política energética nacional y se establecen una serie de incentivos para su inversión.

Una de las razones por las que se quiere dar paso a que otras fuentes de energía ganen más peso en la matriz colombiana es de cara a su diversificación, debido a la alta presencia de la hidroelectricidad que cuenta con una aportación del 64,2 % y donde la generación térmica (carbón y gas) representa el 30,7 % (según datos de la UPME).

Nos hemos reunido con la empresa colombiana ISAGEN y hemos estado charlando con Luis Alberto Posada, Javier Méndez y Julián Echeverri, sobre cómo ven la actualidad y cual el su opinión al respecto de este nuevo panorama que se plantea en el país. Para poner en contexto la importancia que juega ISAGEN dentro del mercado colombiano cabe señalar que es la tercera empresa generadora más grande del país y cuenta con una capacidad instalada de 2.212 MW distribuidos en 1.912 MW hidráulicos y 300 MW térmicos, que se traduce en una aportación del 16,97% a la demanda de energía eléctrica nacional.

¿Qué opináis al respecto de la creación de esta nueva Ley 1715?

Esta ley propone una serie de mecanismos, principalmente de carácter tributario y fiscal, que promueven e incentivan la instalación de fuentes no convencionales de energía y que inversores interesados aprovechen este tipo de ventajas. Al margen de este tema y por encima de todo, se está mostrando que existe una decisión o voluntad por parte del gobierno de abrir la puerta al desarrollo y aprovechamiento de las fuentes de energía renovables no convencionales en Colombia ampliando la oferta en el mercado de energía que lleva funcionado cerca de 20 años. Esta apertura podría introducir un mayor dinamismo en el sector, por lo que desde nuestro punto de vista este aspecto es realmente positivo.

Una de las grandes peculiaridades que se plantean en estos momentos es que en el mercado eléctrico se cubría la demanda bajo un esquema tradicional en el que participaban la generación, el transporte, la distribución y la comercialización de manera activa, en tanto que la demanda jugaba un rol pasivo, siendo atendida en su totalidad con los recursos disponibles.

Bien, que es lo que ocurre ahora, que esta demanda pasiva, en la que el cliente únicamente se limitaba a recibir el servicio de electricidad, da un giro y en esta ley se recoge la posibilidad de introducir en el mercado un nuevo actor que podríamos llamar, consumidor activo o prosumidor. Esta nueva figura va a permitir que en el corto plazo se empiece a desarrollar una nueva industria que va a motivar probablemente el desarrollo de pequeñas plantas energéticas, principalmente a través de fuentes renovables como la eólica o solar a nivel de consumidor final que podrá ofrecer sus excedentes al mercado.

¿Qué rol jugará ISAGEN en este nuevo panorama eléctrico que se plantea?

A día de hoy ISAGEN cuenta con tres canales de mercado que son, un mercado de distribuidores en el que vendemos nuestra energía a comercializadores mayoristas y luego ellos son los que se encargan de comercializarla al cliente final, un segundo mercado de clientes industriales que son intensivos en consumo energético y un tercer grupo que es un mercado “Spot” donde también vendemos parte de nuestra energía generada.

ISAGEN tiene espacio para trabajar en diversos temas y aquí digamos se abren tres posibilidades. Inicialmente lo que vamos a hacer es seguir trabajando y dar continuidad, al desarrollo y aprovechamiento de la generación hidroeléctrica en la que se incluyen cuatro proyectos en estudio que son Cañafisto, Piedra del Sol, Rio Patía y Andaquí (en este enlace encontrarán todos los proyectos). En relación con el desarrollo y aprovechamiento de fuentes renovables no convencionales de energía se incluyen en el portafolio de ISAGEN proyectos eólicos y geotérmicos que comentaremos más adelante.

¿Qué papel va a jugar la energía geotérmica para ISAGEN en este nuevo mercado?

Dentro del grupo de las renovables la energía geotérmica cuenta con características que la hacen especial como son la firmeza que ofrece para generar energía limpia durante todo el año, contribuyendo de manera importante a evitar y/o reducir las emisiones de gases de efecto invernadero inherentes a la generación de energía eléctrica. No obstante, es una fuente que para su aplicación requiere largos tiempos de desarrollo e inversiones cuantiosas y representativas a riesgo en las etapas iniciales, particularmente en la fase de exploración.

En el apartado geotérmico la intención de ISAGEN es avanzar en los estudios de dos proyectos actualmente en desarrollo: el Proyecto Geotérmico Macizo Volcánico del Ruiz y el Proyecto Geotérmico Binacional entre Colombia y Ecuador, Tufiño – Chiles – Cerro Negro. Para el primer proyecto se concluyó la etapa de pre-factibilidad y nos estamos preparando para comenzar la etapa de exploración. Con respecto al segundo es un proyecto que se desarrolla conjuntamente con la Corporación Eléctrica del Ecuador – CELEC EP y se encuentra comenzando la etapa de pre-factibilidad.

Es importante señalar que al respecto de la geotermia en general el Estado le ha otorgado un papel más bien científico y el trabajo hasta ahora se ha centrado principalmente en la caracterización e identificación del recurso.

La geotermia mundialmente se ha desarrollado gracias al papel más participativo que han jugado los respectivos gobiernos, pero para poner en contexto la situación de Colombia, en el mercado nacional no existen subsidios y el estado ha establecido que debe existir una libre competencia por lo que no hay preferencia para una fuente de energía o una tecnología en particular.

A este respecto, la aparición de nuevos esquemas de mitigación de riesgos, en los que ya trabajan algunos bancos multilaterales, va a permitir que las fases iniciales con más riesgo sean cubiertas por estos mecanismos, facilitando que otros agentes, probablemente sin apoyos gubernamentales puedan participar en su desarrollo. En esta línea estamos a la expectativa de la evolución de estos mecanismos que nos permitirían avanzar con un menor grado de riesgo en la etapa de exploración en ambos proyectos.

En definitiva, la llegada de esta nueva Ley 1715 para la que se abre un periodo de consultas entre las diversos actores a los que puede afectar y el gobierno, junto a la creación de estos mecanismos de riesgo, configuran un panorama interesante para el desarrollo de la energía geotérmica en Colombia y en el que ISAGEN está jugando un importante papel.

Queremos agradecer a Luis Alberto Posada, Javier Méndez y Julián Echeverri su cooperación para la realización de esta entrevista.

Para conocer más detalles sobre ISAGEN podéis acceder a su página web en este enlace.